El aprendizaje nos ayuda a descubrir el mundo, ya sea a profundizar los conocimientos que ya poseemos sobre un tema o a adquirir nuevos en algún área de interés. Pero la verdad es que a lo largo de la vida, ¡nunca dejamos de aprender!
Lifelong Learning, un aprendizaje a lo largo de la vida
La UNESCO explica que el Aprendizaje a lo largo de la vida (ALV), o Lifelong Learningen inglés, “se funda en la integración del aprendizaje y la vida”.
Incluye a todas las personas de diferentes edades en los diferentes contextos en los que se encuentren, ya sean estos familia, comunidad, escuela, entre otros. Este tipo de aprendizaje puede darse de muchas formas, tales como:
- Formal: es el aprendizaje estructurado, que sigue ciertos lineamientos y contenidos específicos, es el caso del colegio o universidad.
- Semidirigido: es el aprendizaje donde el estudiante tiene cierta libertad en el contenido y ritmo de aprendizaje, por ejemplo: los tutoriales de Youtube o los cursos en línea.
- Profesional: sucede principalmente en el espacio laboral por medio de las capacitaciones profesionales, talleres o desarrollo de habilidades. La pasión por el trabajo que se realiza contribuye en este tipo aprendizaje.
- Personal: sucede de forma “independiente”, ya sea fuera del trabajo o de los estudios, podría decirse que es una pasión o un interés.
- Indirecto: es el tipo de aprendizaje que sucede “espontáneamente”, en el día a día, sin planificarlo ni tampoco buscarlo. Puede darse en conversaciones, viajes o relaciones.
- Informal: la persona elige de qué forma va a aprender y por lo tanto, puede darse por medio de lecturas, por “prueba y error”, entre otras.
El Aprendizaje a lo largo de la vida no es solo para “ser rentable y atractivo” en el mercado laboral, es sobre todo para mejorar la calidad de vida de las personas. Despierta nuestra curiosidad y nuestra apertura de mente, en otras palabras, nos motiva para seguir aprendiendo de todo lo que nos rodea y nos interesa.
Beneficios del Lifelong Learning
Los beneficios del Lifelong Learning son múltiples, pero para ello, debemos dejar de lado las excusas: “no tengo tiempo”, “no tengo dinero”, “no sé por dónde empezar” y tantas otras que creamos y creemos. Solo de esta forma podremos comprometernos realmente con nuestros objetivos de aprendizaje.
Además, la forma de aprender en la actualidad ha cambiado mucho de hace tan solo algunos años. Nuestra realidad cambia rápidamente y las situaciones a las que nos enfrentamos son inesperadas e inciertas, ¿cómo reaccionar ante ellas?
Es por medio del aprendizaje que podremos ser más flexibles ante estos cambios, adquiriremos una mayor capacidad de improvisación y estaremos mucho más dispuestos para aprender de los errores.
Otros de los beneficios que obtendremos con el aprendizaje a lo largo de la vida son:
- Desarrollo del pensamiento crítico: la habilidad del pensamiento crítico es necesaria en cualquier etapa de la vida, ya que nos permite pensar de forma independiente, responsable y productivamente.
La forma en que pensamos el mundo, a los otros y a nosotros mismos afecta nuestra experiencia personal. No solo define nuestro presente, sino nuestro futuro. Por ello, es importante recordar que la forma en que decidimos pensar y actuar, influencia nuestra realidad.
- Desarrollo de habilidades de liderazgo: una persona que es consciente de su realidad y de sí mismo, es capaz de actuar y de tomar decisiones, inspirar, motivar y empoderar. Básicamente podrá descubrir su potencial, en él mismo y en los otros. Convirtiéndose o potencializando sus capacidades de líder.
- Mejor manejo de la comunicación: al ejercitar nuestras habilidades de comunicación por los distintos medios a nuestra disposición, lograremos mejores relaciones y más productividad.
El lifelong learning contribuirá a que vivas de una mejor forma, con una mente activa en constante aprendizaje y reflexión.